Política de integración de los riesgos de sostenibilidad

El 10 de marzo de 2021 entró en vigor el Reglamento (UE) 2019/2088, sobre la divulgación de información relativa a la sostenibilidad en el sector de los servicios financieros (SFDR, por sus siglas en inglés), que obliga a las gestoras de fondos como Sherpa Capital, autorizada por la CNMV, a revelar a los inversores cómo se integran los riesgos de sostenibilidad en sus operaciones.

En concreto, el artículo 3 del Reglamento obliga a los participantes en los mercados financieros a divulgar en sus webs las políticas relativas a la incorporación de los riesgos de sostenibilidad en sus procesos de toma de decisiones de inversión.

La siguiente declaración responde a dicha obligación.

En Sherpa, nos adherimos a la definición de riesgo de sostenibilidad que figura en el artículo 2(22) del SFDR. Percibimos los riesgos de sostenibilidad como posibles acontecimientos o situaciones medioambientales, sociales o de gobernanza que, de materializarse, podrían afectar negativamente y de forma significativa al valor de una inversión (riesgo financiero).

En este sentido, integramos los criterios ESG en nuestro proceso de inversión, garantizando que la integración de los riesgos de sostenibilidad sea parte esencial en el proceso de toma de decisiones para cada inversión. Esto se hace en cada fase del proceso de inversión de la siguiente manera:

Identificación/Origen de la operación:
Sherpa emplea una lista de exclusión para descartar inversiones en sectores incompatibles con nuestros valores y los de nuestros inversores.

Due Diligence ESG:
Un asesor externo especializado lleva a cabo la due diligence en materia de ESG, donde se identifican los riesgos de sostenibilidad.

Controles internos:
Una sección ESG en el memo del Comité de Inversiones analiza cualquier riesgo significativo de sostenibilidad o acontecimiento adverso detectado, junto con los planes de mitigación solicitados por el Comité, en caso de que sea necesario.

Periodo de inversión:
En cada empresa participada se aplica una estructura de gobernanza ESG adecuada y un plan de acción ESG básico, junto con KPIs ESG seleccionados en función de su relevancia financiera para la empresa.